Luis Alberto Calvo Sáez, veterinario, escritor y pintor, presentó ayer en el Colegio de Veterinarios de Zamora la obra "Escuela Gráfica de Toro", una publicación hecha con esmero estético y con la voluntad de servir a todos los públicos.

«Es un resumen de pasiones: por el toro bravo, por el dibujo, por la literatura y por la vida» resumió Calvo Sáez. No deja de ser un libro que denuncia el maltrato que sufre el animal en la plaza de toros debido a unas suertes de varas aplicadas con maldad. «Hace mal en un cien por cien de los casos porque se ejecuta mal la pega y no se hace de forma ortodoxa. El toro sufre y sufren los espectadores» explicó Calvo, que aludió a que «el responsable último es el torero, del que depende el picador, porque interesa que el toro llegue suave, mermado de bravura». Es una segunda edición que aborda las aptitudes del ganado, la anatomía, las capas, los encastes y las lesiones. La imagen, en este caso, da luz a los contenidos.