Las principales organizaciones agrarias de Castilla y León, Asaja, UCCL y La Alianza UPA-COAG, advirtieron ayer de la situación "catastrófica" a la que se enfrenta el sector en la comunidad, con unas pérdidas en el campo que superan los 2.000 millones de euros por la peor sequía de los últimos años, y que está poniendo en riesgo la continuidad de miles de explotaciones.

Numerosos participantes en la protesta del campo en Valladolid. | M. Ch.-Ical

En una manifestación que concentró en Valladolid a 1.200 personas, según la Policía, y 2.000, a juicio de los convocantes, además calificar de "insuficientes" las ayudas puestas en marcha por el Gobierno y de reclamar ayudas a la Unión Europea a través del mecanismo de reserva de crisis, también criticaron el abandono de la Junta que, hasta la fecha, no ha puesto en marcha ningún tipo de subvención, aunque si que confirmaron que han sido convocados por la Junta el próximo martes a una reunión del Consejo Agrario.

Un participante en la protesta porta un tambor. | Miriam-Chacón-Ical

La manifestación arrancó pasadas las doce horas a las puertas de la Delegación del Gobierno en Castilla y León. Desde la Cúpula del Milenio se dirigieron a la avenida de Isabel la Católica, para cruzar el puente de Poniente. Desde allí, continuaron por la avenida de Gloria Fuertes, hasta la sede de la Consejería de Agricultura y Ganadería, ubicada en la calle Rigoberto Cortejoso.

Además, todas organizaciones resaltaron que ante situación límite a la que se enfrenta el campo las protestas continuarán siempre que las distintas administraciones continúen dando la espalda al sector.

Al inicio de la protesta, el presidente de Asaja Castilla y León, Donaciano Dujo, recalcó que mientras la media de la cosecha de cereales en la comunidad ronda los 6,5 millones de toneladas, este año no se alcanzará ni la mitad debido a la sequía. Dujo cifró en 2.000 millones de euros las pérdidas del sector y recordó que esta “catastrófica” cosecha llega después de otra mala campaña, la de 2022. A su vez, el presidente de Asaja criticó que la Unión Europea no haya puesto en marcha la reserva de crisis, "a pesar de las numerosas medidas ambientales demagógicas que nos ha impuesto". A su vez, lamentó la lentitud de Bruselas en "auxiliar a los profesionales que dan de comer a la sociedad", mientras que acusó al Gobierno de discriminar a Castilla y León, ya que en otras comunidades autónomas las ayudas estatales son el doble que las establecidas en la Comunidad.

Por su parte, Lorenzo Rivera, de la Alianza UPA-COAG, que estuvo acompañado por Aurelio González, consideró que a la sequía se suman los altos costes de producción, que generan la "tormenta perfecta".