El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, diferenció ayer en Roa (Burgos) el modelo presentado por la Comisión Europea respecto al impuesto a las eléctricas para gravar los beneficios extraordinarios de las energías inframarginales, que consideró “una propuesta mucho más razonable y lógica que el disparatado impuesto español”.

Así lo aseveró durante el viaje que realizó a la localidad de Roa (Burgos) junto al presidente del PP en Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, donde visitaron un viñedo y la sede de la Denominación de Origen Ribera del Duero. Para Feijóo, la propuesta de la Unión Europea es “claramente absolutamente distinta a la propuesta española”, al tiempo que calificó de “un tremendo error” el planteamiento del Gobierno en el que no se gravan los beneficios, sino las ventas.

En este sentido, Feijóo añadió que “el siguiente grave error es el impuesto español”, que dijo, “no rebaja la factura final de los consumidores sino que va a la recaudación fiscal del Ministerio de Hacienda”. “Hay una diametral diferencia total entre la propuesta europea y la española”, exclamó, al tiempo que apeló a esperar a conocer la “letra pequeña” del planteamiento de la Unión Europea, aunque espetó que “de entrada, es más razonable y lógico” que el impuesto español.

Asimismo, acreditó que el PSOE y sus socios han presentado en apenas una semana tres modelos energéticos distintos respecto a la energía térmica, con la central de As Pontes, como lleva exigiendo el PP; con la nuclear, en Extremadura, como plantea el PP; o con Podemos y la excepción ibérica.

Feijóo instó al Gobierno a copiar el conjunto de propuestas económicas y energéticas del PP, como ha hecho con la bajada del lVA de la luz y el gas y pidió que esta reducción se extienda hasta el final del invierno. También demandó al PSOE que se aclare “entre lo que dice y lo que hace: parecen partidos distintos y gobiernos diametralmente opuestos”.

Compromiso con el sector vitivinícola y petición de una mejor regulación del agua

El presidente del PPCyL y de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, expresó ayer el compromiso con el sector vitivinícola, una de las “joyas” de la comunidad, y demandó al Gobierno central la reprogramación del Perte Agroalimentario al considerar que su “diseño inicial no es adecuado”. Fernández Mañueco y el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo visitaron ayer viñedos en Roa, sede de la Denominación de Origen de la Ribera del Duero, donde apoyaron a este sector y plantearon algunas “respuestas” ante una serie de problemas por la pandemia, brexit, aranceles de EE UU, la guerra en Ucrania y la sequía. Precisamente, el presidente autonómico enmarcó esta tercera de Feijóo a Castilla y León en las últimas tres semanas en el compromiso, en este caso, con la industria agroalimentaria, después de que la semana pasada lo hiciera en Ávila con la industria del automóvil. Por otro lado, se dirigió al Gobierno para pedir un plan hidrológico nacional para una “mejor” regulación del agua y la reprogramación del Perte Agroalimentario para priorizar elementos como la sostenibilidad o la digitalización, para cuyas reivindicaciones pidió el apoyo del presidente del PP.