Casi 10.000 millones de euros (9.918) serían necesarios para poner la red de carreteras españolas en buen estado de conservación y superar el déficit que arrastra desde hace más de una década, con Castilla y León a la cabeza con 1.738 millones, seguida de la Castilla -La Mancha con 1.297 y Andalucía, con 1.276, según la Asociación Española de Carreteras (AEC), que cree que “no hay otro camino” que implantar la tarificación por uso.

La estimación, recogida en el informe “Necesidades de Inversión en Conservación de Carreteras en España 2021-2022” que ha presentado este jueves la AEC, supone un incremento del déficit de 2.455 millones de euros respecto al estudio 2019-2020, de los cuales unos 1.500 millones se deben a la subida de precios de las materias primas.

El presidente de la AEC, Juan Francisco Lezcano, ha explicado que las necesidades de inversión son más elevadas porque han evaluado a precios de hoy el coste de las actuaciones, aunque al mismo tiempo el estudio acusa la reducción sin precedentes de la movilidad debido a la pandemia de los últimos dos años, lo que se tradujo en un menor impacto en los pavimentos.

Tras recordar que circular por una carretera en mal estado aumenta el consumo de combustible y las emisiones de CO2 un 10 %, el presidente de la AEC ha hecho hincapié en que la situación “no se arregla con parches, sino con una actuación sostenida en el tiempo”, que a su juicio llevaría a invertir entre 1.600 y 1.800 millones de euros al año durante una década.

"No hay otro camino"

“No hay otro camino que los sistemas de tarificación por uso y las estrategias de colaboración público-privada. Nosotros no entramos en los modos o sistemas, pero creemos que la carretera es un servicio público esencial y que exista una tarificación por uso no es un disparate si queremos que estén en un estado de conservación adecuada, que revierta en la disminución del consumo de combustible y de la emisión de CO2”, ha argumentado Lezcano.

A la luz de este informe, el portavoz de la Junta de Castilla y León, Carlos Fernández Carriedo, ha defendido que el déficit en conservación de carreteras detectado en la comunidad pone de manifiesto los problemas que genera el modelo de financiación autonómica. “Esto certifica que el modelo de financiación autonómica no contempla los costes vinculados al territorio”, ha señalado, al tiempo que ha lamentado que el dinero se distribuya entre las comunidades con un criterio de población cuando Castilla y León es la región de España con más kilómetros de carreteras. “Contamos con el 6% de los fondos nacionales para proteger el 20% del territorio, esto supone un esfuerzo gigantesco”.