El PIB de Castilla y León creció un 3,2% en el primer trimestre del año, cinco décimas menos que en el trimestre anterior (3,7%), lo que refleja un ”evidente deterioro en el crecimiento económico en los últimos meses” por la crisis inflacionistas, el desabastecimiento de materias primas y la rotura de estocks con su impacto en la industria y una menor cosecha.

El consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, presentó la Contabilidad Regional de Castilla y León del primer trimestre, donde destacó esta desaceleración, pero indicó que “seguimos creciendo y Castilla y León estará entre las autonomías que primero alcance el nivel de PIB previo a la crisis”. En este sentido, afirmó que la comunidad ya ha recuperado el 77% del PIB que había perdido en 2020.

Carriedo reconoció que todo hace pensar que la previsión de crecimiento del 4,9% para el conjunto del ejercicio que se emitió en octubre no se cumplirá, por la inflación, los problemas de abastecimiento, la rotura de estock o la retirada de estímulos del Banco Central Europeo, con la consiguiente subida de tipos. “Evidentemente será menor”, dijo, aunque indicó que todavía es “difícil” calcular la rebaja porque depende de la evolución de diferentes factores y la aparición de nuevos problemas, como la ruptura con Argelia.

Carlos Fernández Carriedo aclaró que si la comunidad crece a un ritmo del 2,6%, recuperará la totalidad del PIB perdido en 2020, y aunque en estos momentos todo hace indicar que la región avanzará por encima de ese porcentaje, “no hay mucho margen”.

Costes energéticos

El deterioro de la economía, dijo el consejero, se produjo por la industria, muy afectada por los costes energéticos, la rotura de estocks y el desabastecimiento de materias primas, y el impacto de la climatología en la cosecha, que estará por debajo del año pasado.

En concreto, el VAB del sector primario de Castilla y León anotó en el primer trimestre de 2022 un descenso interanual del 5,2%; y el de la industria, del 5,8%. Entre las ramas industriales, las manufactureras disminuyeron un 2,2%.

Por el contrario, el sector de la construcción anotó una variación interanual del 2,5% en el primer trimestre de 2022; y el VAB del conjunto del sector servicios registró en el primer trimestre del año un crecimiento interanual del 7%, con un mejor comportamiento de las actividades financieras y de seguros e inmobiliarias.