El consejero de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Alejandro Vázquez, destacó ayer que la creación de la Viceconsejería de Asistencia Sanitaria, Planificación y Resultados en Salud, dirigida por Jesús García-Cruces, responde a la necesidad de coordinar el trabajo de la Gerencia Regional de Salud con el resto de estructuras de la Consejería, para evitar que se repitan situaciones como las vividas durante la pandemia, cuando se produjo una cierta descoordinación “entre una parte de la Consejería y la asistencia sanitaria”.

Vázquez, que realizó estas declaraciones tras la toma de posesión de Jesús García-Cruces, también anunció que antes de finalizar el año presentará un plan de choque para reducir las listas, así como un plan estructural para que las necesidades de estrategias de este tipo sean excepcionales y lograr una organización laboral que permita que las listas de espera estén dentro de unos niveles asumibles por parte de la población.

Además, recalcó que otro de sus objetivos de su mandato es recuperar la presencialidad de las consultas médicas, una de las principales demandas de la sociedad, y adelantó que con el fin de paliar la falta de médicos, la Consejería ofrecerá a todos los residentes de Medicina Familiar y Comunitaria y de las especialidades que son deficitarias un plan de fidelización con contratos de tres años.

A su vez, y preguntado por las continuas manifestaciones que vienen protagonizando los profesionales sanitarios, Vázquez reconoció que la pasada legislatura fue complicada, pero destacó que desde que asumió el mando de la Consejería una de sus prioridades es establecer un diálogo “intenso y directo” con los todos profesionales de la Consejería, así como con sus representantes sindicales y con las organizaciones colegiales. “En una organización como esta el diálogo es fundamental para poder desempeñar el trabajo todos los días”, aseveró. El consejero explicó que el organigrama de su departamento se completará en las próximas semanas ya que se han modificado varias áreas.