El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, aseguró ayer que para perdonar a los terroristas, antes deben pedir perdón y cumplir íntegramente sus penas: “Tiene que haber justicia, tienen que cumplir sus penas íntegras y luego, si las víctimas lo deciden, que perdonen crímenes tan graves”, resumió.

Como Comisionado para las Víctimas del Terrorismo del Gobierno autonómico, García-Gallardo pronunció estas palabras en su intervención en la inauguración de las Jornadas sobre Víctimas del Terrorismo en la Universidad de Burgos, desarrolladas en la Facultad de Derecho.

El vicepresidente recordó además que el perdón es un concepto cristiano y requiere elementos que no se dan en el caso de los terroristas, como son el arrepentimiento, el dolor de los pecados y el propósito de enmienda. Para García-Gallardo, es un “deber colectivo” recordar los riesgos de no combatir a “una banda terrorista cuyos herederos políticos están en la dirección del Estado”.

En este sentido, afirmó que no puede ser que los presos de ETA se beneficien de una política penitenciaria distinta, que “les es favorable por fines electorales del Gobierno a costa de la Justicia, la memoria y la dignidad de las víctimas del terrorismo”.