Izquierda Unida de Castilla y León exigió hoy al presidente de la Junta y del PP, Alfonso Fernández Mañueco, que defienda la ganadería tradicional y a los pueblos, frente a las macrogranjas. Indicó que la polémica “nace de una manipulación por parte de Mañueco y ha continuado el portavoz de la Junta en funciones, inventando unas declaraciones inexistentes del ministro de Consumo donde supuestamente pedía a los extranjeros que no consumieran carne española”.
Según aclara en un comunicado de prensa remitido a Ical, el coordinador general de Izquierda Unida Castilla y León, Juan Gascón, consideró “un ataque contra nuestra tierra que el PP prefiera las macrogranjas al modelo de ganadería tradicional de Castilla y León que defendió el ministro de Consumo, Alberto Garzón, en su entrevista en el medio británico The Guardian”.
El dirigente de IU subrayó la defensa de la ganadería tradicional y extensiva que el ministro de Consumo, hace en la citada entrevista y añade que “además ha sido este Gobierno del que Garzón es ministro el que ha prohibido la venta a pérdidas mientras la derecha del PP y de Vox votaban en contra”. Destacó también las medidas tomadas por Consumo para favorecer las pequeñas granjas, artesanales y de venta directa, “como una gran oportunidad para el consumo local ganadero”.
IU lamenta la actitud de Tudanca
Asimismo, lamentó la actitud del candidato del PSCyL, Luis Tudanca, “colocándose del lado del lobby de la macrogranjas, confrontando con el ministro, en una clara falta de lealtad, a un ministro que comparte gobierno con su partido, y en contradicción con propuestas propias realizadas en otras instituciones locales y provinciales por su partido”.
El coordinador de IUCyL solicitó al PP que la crítica no se realice “sobre polémicas creadas por sectores interesados en promover el modelo de ganadería industrial, sino sobre un debate honesto, riguroso y transparente”. Recuerdan su apoyo al modelo ganadero y su posición contra las macrogranjas, presentando múltiples alegaciones junto a organizaciones sociales y plataformas contra la política de la Junta.
Señaló IU que “estos macroproyectos de ganadería industrial han favorecido que las pequeñas y medianas explotaciones familiares de ganadería hayan ido desapareciendo mientras se batían récords de producción”. Según cifran, en los últimos 12 años se han cerrado cerca del 37,5 por ciento entre las actividades de ganadería familiar reducida y de menos de mil animales, según un informe de Greenpeace que critica el modelo de ganadería industrial.
“En Castilla y León crecen las grandes explotaciones mientras que las pequeñas desaparecen por no poder competir”, valoró y afirmó que la pérdida del 13 por ciento de ocupados en agricultura y ganadería “es el modelo de la derecha y del PSOE”. Además, criticó que “pese a la oposición de muchos ayuntamientos y gran cantidad de movilizaciones contra las macrogranjas surgidas en Castilla y León, la Junta ha seguido facilitando, mediante modificaciones legislativas la implantación de macrogranjas”.
