La consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco, aseguró hoy que la situación del COVID-19 en los centros residenciales de Castilla y León está "controlada" y añadió que "no se están comportando mal" en esta sexta ola de la pandemia. Este jueves, dijo, hay 177 mayores contagiados entre los 44.000 usuarios, frente a los 185 del martes y los 191 del pasado viernes.
En la comparecencia posterior al Consejo de Gobierno, la titular de Familia indicó que los brotes y focos de contagio en las residencias no son el problema en este momento, dentro de la "gran incidencia" de la sexta ola. Sin embargo animó a "aumentar" las medidas de prevención y protección, como la distancia de seguridad o el uso de las mascarillas.
Asimismo, la consejera señaló que no se van a prohibir ni las salidas de los residentes estas Navidades, ni las visitas en los centros, pero recordó que la Junta pide que se hagan en espacios "amplios" y "ventilados", así como que haya un menor movimiento de personas ajenas por el centro, lo que se traduce en "evitar las habitaciones". Además, las personas que salgan en estas fiestas de sus centros, tendrán que hacerse una prueba y mantenerse en observación unos días, por lo que no podrán participar en actividades grupales.
Finalmente, la consejera de Familia indicó que la mayor medida es la vacunación, ya que aseguró que "prácticamente todos" los residentes están vacunados con la tercera dosis desde hace tiempo. Por ello, insistió en que los familiares o trabajadores se vacune porque es lo que "realmente funciona".
