Castilla y León ha registrado entre enero y agosto de 2021 un total de 18.058 accidentes de trabajo, de los cuales 16.426 han sido en jornada laboral y 1.632 in itinere. Del número total de siniestros, 17.872 fueron leves y 153 graves mientras que 33 trabajadores fallecieron

Comisiones Obreras (CCOO) de Castilla y León señaló en un comunicado que las tendencias de los anteriores meses se dispararon en el mes de agosto, con un saldo de 2.665 accidentes leves, 23 accidentes graves y seis víctimas mortales. Por lo tanto, se produjo un incremento del 17,1 por ciento respecto al número de accidentes con baja en jornada de trabajo respecto al mismo periodo del año anterior. Es decir, el número de accidentes con baja en jornada de trabajo se elevó en 2.408.

En cuanto a los accidentes mortales, fueron por golpes, caídas, atrapamientos y atropellos. De este montante, diez han sido por lesiones no traumáticas -infartos, ictus, lesiones claramente relacionadas con la organización del trabajo y el estrés-. El sindicato consideró que esta elevada cifra pone de manifiesto una siniestralidad originada por la falta o ineficacia de las condiciones de seguridad existentes. A juicio de CC OO, esta realidad apunta a la necesidad “urgente” de derogar la vigente reforma laboral de 2012, apostando por la contratación indefinida con el objetivo de terminar con un mercado laboral precario íntimamente relacionado con la siniestralidad laboral.

Ascenso dramático de la siniestralidad

El secretario autonómico de Acción Sindical, Salud Laboral y Medio Ambiente de Comisiones Obreras, Fernando Fraile, denunció el ascenso dramático de la siniestralidad laboral en Castilla y León por segundo mes consecutivo. “Hasta la fecha llevamos 33 accidentes mortales en la Comunidad, una cifra trágica. Muchos de ellos se podrían haber evitado si existiera un mayor compromiso por parte de los empresarios con la seguridad y la salud de las personas trabajadoras. Todo ello mediante el fomento de la cultura preventiva en los diferentes estamentos del tejido productivo de la Comunidad, así como de una formación e información específica, adecuada y suficiente a la realidad de los trabajadores y las trabajadoras en cada centro de trabajo”, declaró.

“A esta lacra hay que poner coto de inmediato”, exigió Fraile, tras recordar las cuatro jornadas de agosto con accidentes laborales. Día 6, tres personas heridas en el derrumbe de un andamio en Villa del Prado (Valladolid); día 9, dos personas muertas al caerse desde 10 metros de altura desde un tejado en la planta de Gonvarri-Gestamp en Burgos capital; día 11, dos personas muertas y tres heridas en Moreruela de Tábara (Zamora); día 19, una persona fallece al caerse de un tejado en Ponferrada (El Bierzo-León)... “Y así, suma y sigue”, sentenció.

Enfermedades laborales 

De la misma manera, CC OO advirtió que las enfermedades profesionales siguen la misma tendencia, hasta tal punto que se han incrementado en un 6,4 por ciento, declarándose 16 enfermedades profesionales con baja más que en el mismo periodo de 2020. Por sectores de actividad despunta la construcción, que ha declarado once más, seguido de servicios con nueve más y el sector agrario con ocho más.