La consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco, aseguró ayer en Valladolid que no se ha detectado un “especial” incremento de los delitos de odio en Castilla y León, tras conocerse la presunta agresión homófoba en Madrid. Ademas, demandó un compromiso de los partidos políticos, los medios de comunicación y la sociedad, en general, para luchar “sin fisuras” contra cualquier tipo de violencia y “atajar” cualquier agresión contra “quien piensa diferente, es diferente y, muy especialmente, contra las mujeres”. Durante la presentación de la nueva campaña de sensibilización de la ONCE, Blanco condenó los delitos de odio y apostó por abordar el problema, por parte de todos, con “seriedad” y “mucha responsabilidad”. En este sentido, la consejera de Familia apuntó que la Junta continúa trabajando con las campañas de concienciación y sensibilización, “una labor que es intensa en los centros escolares”.