El vicepresidente, portavoz y consejero de Transparencia, Ordenación del Territorio y Acción Exterior, Francisco Igea, aprovechó ayer su visita para conocer las labores de exhumación en la Casa de los Alfredos, en Medina del Campo (Valladolid), donde se han recuperado 63 cuerpos de desaparecidos en 1936, para destacar que la contribución de la administración autonómica con la memoria histórica es un asunto de “justicia elemental”.

“No se puede pedir menos que eso a una administración que es recuperar la dignidad de quienes fueron brutalmente asesinados y preservar la memoria y la historia de lo ocurrido. Es un sitio sagrado que sirve para recordar que esto no puede volver a suceder puesto que no hay nada que esté por encima de la vida humana”, aseguró. Una contribución de 92.000 euros de la Junta a la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Valladolid que ha permitido la financiación de los trabajos realizados tanto en la bodega como en el conocido como “pozo de los horrores”.

“Si hay algo de lo que estamos legítimamente orgullosos es haber contribuido, desde hace muchos años, a un acto de justicia elemental por que ya es hora que los hijos y nietos puedan enterrar dignamente a sus ancestros”, añadió.