El presidente de la Cámara de Contratistas de Castilla y León, Enrique Pascual, cifró hoy en 35.000 los empleados que el sector de la construcción, incluido el de obras públicas, necesita incorporar en los dos próximos años en la comunidad, a la vez que advirtió que de esta falta de mano de obra y el incremento desorbitado del precio que están experimentando las materias primas puede poner en riesgo el cumplimiento de ciertos contratos.
Pascual, que hoy presentó el balance en la comunidad durante 2020 y las previsiones para 2021, hizo un llamamiento a los jóvenes para que se interesen por un sector muy modernizado y que en los próximos años experimentará un gran crecimiento que estará acompañado de mucha estabilidad.
Además de apostar por la formación y de destacar que se trata de un sector con sueldos superiores a los de la industria, también apuntó que se pretende incorporar a muchas mujeres, que ahora solo representan el 8 por ciento, dado que la modernización que ha sufrido en los últimos años hace que el esfuerzo físico cada vez sea menor.
A su vez, Pascual reconoció que esta falta de mano de obra está provocada por la mala imagen que arrastra el sector desde la crisis de 2008, cuando uno de cada dos trabajadores acabó en la calle. Además, también argumentó que ha sido un sector en el que tradicionalmente las generaciones mayores enseñaban a los más jóvenes, cadena que también se ha roto por efecto de la crisis y “ahora nos encontramos sin trabajadores y sin formadores”.
No obstante, reclamó a las administraciones que pongan el foco en la economía sumergida, a la vez que advirtió de los efectos un sistema de subsidios, con una alta dotación y con un reparto indiscriminado. “Le estamos haciendo demasiado fácil a determinados colectivos de jóvenes continuar en casa de sus padres”, aseguró.
Déficit en infraestructuras
Por otra parte, Pascual también se refirió a los déficit en infraestructuras en Castilla y León y remarcó la falta de mantenimiento en la red de carreteras por parte de todas las administraciones, y aseguró que de una inversión anual de 600 millones se ha pasado a 230.
Además, también reclamó una mayor inversión para fomentar en el transporte de mercancías por ferrocarril, la finalización de la A-11 y un mayor gasto en la depuración de agua de los municipios más pequeños.
