El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, puso ayer sobre la mesa de necesidad de abordar el problema de la despoblación con una “estrategia global” sin que haya “fronteras territoriales ni colores políticos” al tiempo que se mostró convencido de que con la implicación del Gobierno central, las comunidades, las administraciones y la iniciativa privada se podrá conseguir un futuro “mejor” para el medio rural.
Así lo puso de manifiesto Fernández Mañueco durante su intervención en la inauguración de la IV Feria Nacional de Repoblación de la España Rural (Presura) que se celebró ayer en la capital soriana y que contó con la presencia, entre otros, del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de la presidenta de Navarra, María Chivite; de La Rioja, Concepción Andreu; la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera; la de Derechos Sociales, Ione Belarra; el presidente nacional del PP, Pablo Casado; el portavoz de Cs, Edmundo Bal, y el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero.
Durante su intervención, Fernández Mañueco reconoció que la despoblación “requiere una estrategia global sin que haya fronteras territoriales ni colores políticos” y citó tres claves en esta estrategia como es la obligación de las comunidades autónomas de “cumplir con la parte” que les corresponde; un nuevo modelo de financiación autonómica que articule el coste real de los servicios en el medio rural y que los fondos europeos lleguen a la España interior “para corregir inercias y cambiar tendencias”.
Asimismo, se refirió a la necesidad de la transformación digital y la extensión de la banda ancha, que en el caso de Castilla y León llega en la actualidad al 73% de la población y que puede llegar al 90% con las inversiones que se están realizando de la mano del Gobierno, las diputaciones y los ayuntamientos, según informa Europa Press.
“Pero la marcha es lenta, y los más desfavorecidos son los pueblos pequeños y lo que viven en ellos”, aseveró Fernández Mañueco, quien consideró fundamental la implicación de Sánchez y del Gobierno de España “para despejar esa maraña administrativa” que a veces paraliza la inversión, por lo que pidió “un marco ágil y eficaz” de colaboración público-privada para llegar a todo los territorios y generar “oportunidades de todo tipo”.
Además, recordó que las tres comunidades vecinas han pedido sendas entrevistas con la vicepresidenta cuarta y ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, y con la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, para abordar la política demográfica y la reforma de la financiación autonómica, y aprovechó para señalar que la dispersión y baja población encarece el coste de los servicios.
El presidente de la Junta puso en valor las políticas de su Gobierno con el mundo rural, donde mencionó una “sanidad de cercanía”, escuelas abiertas con tres alumnos, calidad en los servicios sociales, en la dependencia con teleasistencia gratuita, ayudas al alquiler a 12.000 hogares, bono concilia de 750 euros para cuidado de hijos y bono gratuito de transporte a la demanda para 5.000 localidades. Asimismo, el presidente de la Junta consideró que los fondos de Nueva Generación “deben ser una oportunidad para llegar a la España interior”, deben ser una oportunidad “para corregir inercias que incrementan la despoblación, cambiar tendencias y fijar población” a lo que añadió que la despoblación “debe estar en la agenda cotidiana de trabajo” entre las comunidades autónomas y el Gobierno, informa Ical.
Sánchez ofrece construir una alianza nacional ante el reto demográfico
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, animó ayer a “desplegar acciones” para que los 10.000 millones de nuevos fondos europeos que se destinan a la España rural “se toquen y sean tangibles para sus vecinos” y tendió la mano a instituciones y territorios, para que desde un modelo adaptado a cada realidad, crear una gran alianza por el reto demográfico y que este país “no se levante únicamente en periferias”. Sánchez, durante su intervención en la inauguración en Soria de la Feria Nacional para la Repoblación de la España Rural (Presura), defendió que el fenómeno de la despoblación no es “irreversible” y aseguró que es una tarea “inaplazable, urgente e impostergable”, aunque advirtió que será a largo plazo y en un trabajo “juntos y unidos todos y cada uno de los territorios”.
Explicó el presidente que este plan para la cohesión y transformación del país, que cuenta con 10.000 millones de euros de fondos europeos para el desarrollo de 130 medidas que impulsen la España rural durante los próximos seis años, es una “caza de herramientas” para que cada territorio “despliegue su modelo” y le adapte a su realidad. “Es un abanico de posibilidades”, apostilló. “Toca desplegar acciones para que los 10.000 millones lleguen al mundo rural, que puedan tocar, que sean tangibles para sus vecinos”, sostuvo, convencido de que se devolverá “el palpito para una vida plena y para convertir los pueblos en un semillero de innovación”. “Una España viva y habilitada”, aseveró.
El presidente tendió la mano a todos los territorios en un proyecto colectivo para “superar brechas territoriales, sociales, generacionales y de género” y avanzó que se creará una gran alianza con todas las instituciones para “fijar líneas de trabajo comunes y agendas” que refrenden los objetivos de la Agenda Nacional frente al reto demográfico. Destacó que la cohesión territorial “explicará muchos de los proyectos que acepten los ministerios” y remarcó que en las diversas convocatorias de manifestaciones de interés general se han recibido un número importante y también en calidad de “proyectos extraordinarios, esperanzadores e ilusionantes” de gente joven y no tan joven que apuesta por el medio rural, informa Ical.
