El Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl) ha publicado hoy viernes 28 de mayo la convocatoria para la selección de centros que quieran presentar su proyecto de ‘Bibliotecas Escolares de Futuro. Bibliotecas 2030’ que se desarrollará en el curso 2021-2022. Una convocatoria que contempla subvenciones de hasta 4.000 euros para que los centros públicos de la comunidad presenten proyectos basados en la reconfiguración de la biblioteca escolar en diferentes espacios físicos y virtuales para la innovación, la creación, la experimentación y el trabajo interdisciplinar como radio, Cineclub, Bibliomaker, otros espacios y rincones; o su promoción como espacio inclusivo y de impulso a la igualdad entre los géneros.

Un comunicado de la Junta aseguró que la Consejería de Educación lleva varios cursos ayudando a los colegios a avanzar hacia un modelo de bibliotecas escolares de futuro y en esta edición se contempla una dotación de 180.000 euros para que estos espacios escolares "superen" el modelo de espacio físico más tradicional y avanzar hacia un formato más moderno y virtual donde los alumnos puedan ser innovadores y creativos. De este modo, la Consejería de Educación ayuda a los centros a crear esas nuevas bibliotecas que también están presentes en las aulas para experimentar con el trabajo interdisciplinar.

La administración educativa también tendrá en cuenta el fomento de actividades de escritura, producción de contenidos y lecturas compartidas en distintos soportes; el desarrollo de proyectos documentales y de las competencias mediáticas -fomento del pensamiento crítico y habilidades transmedia-; y la innovación en el ámbito de las tecnologías digitales. El plazo para presentación de proyectos estará abierto hasta el 16 de julio y su resolución está prevista para el mes de octubre.

Esta iniciativa favorece, además, la adquisición de las competencias mediáticas para formar alumnos críticos por medio de las nuevas prácticas de lectura y escritura. Por ello, se debe permitir a los escolares el acceso a la información en múltiples formatos y en espacios en los que tengan acceso a la tecnología para crear su propio contenido. Préstamo, exposiciones, investigación, debates, exposiciones y lectura silenciosa pero también libros digitales, radio, cineclub, teatro, música, robótica y juegos educativos, entre todos. "Todo tiene que tener cabida en estas bibliotecas escolares del futuro", sentenció la nota de la Junta.