El Plan Familias Castilla y León pretende ampliar el paraguas de la administración regional hacia los más vulnerables. Se trata de 57 medidas, con un impacto económico anual de 75 millones de euros, presentado esta mañana en Ávila por el presidente Alfonso Fernández Mañueco. “La Junta de Castilla y León protege a las familias”, ha afirmado el presidente que, además, ha señalado que se cumple con uno de los compromisos electorales. También recordó otras ayudas como la aprobación de beneficios fiscales por 44 millones al año; medidas de conciliación, de educación, como la extensión del programa Crecemos a todos los pueblos que lo demanda, o de vivienda, con las ayudas al alquiler a más de 12.000 hogares, entre las muchas iniciativas de apoyo a las familias que existen en Castilla y León.

El jefe del Ejecutivo autonómico ha clausurado una jornada en el complejo NaturÁvila –organizada por la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades con motivo de la conmemoración, mañana sábado, del Día Internacional de las Familias–, en la que se ha explicado que el Plan Familias presentado hoy aglutina el conjunto de ayudas, recursos, programas y servicios autonómicos a disposición de las familias castellanas y leonesas e incorpora nuevas medidas para atender las demandas actuales y adelantarse a las necesidades emergentes.

Entre estas novedades, el presidente ha destacado la activación del Bono Concilia, dotado con tres millones de euros, y dirigido a facilitar la conciliación de la vida personal y laboral a las familias con niños de hasta tres años cuando los dos progenitores trabajan. Antes de finalizar el año, las que cumplan los requisitos podrán acceder a una ayuda de 750 euros por hijo para hacer frente a los gastos derivados del uso de los servicios de conciliación.

Para situaciones de vulnerabilidad se pondrá en marcha a principios del próximo año de los Centros MediaCyL, una red de servicios de mediación familiares gratuitos y disponibles en las nueve provincias de la Comunidad, ideados para ayudar a familias que atraviesan situaciones de dificultad o de conflicto a superar estas adversidades. Un equipo multidisciplinar de profesionales especializados –integrado por psicólogos, abogados, trabajadores sociales y mediadores– prestará atención y apoyo a estas personas, favoreciendo el contacto y la comunicación familiar.