El ritmo lento, aunque constante, de mejora de la ocupación de las unidades de críticos en Castilla y León condiciona la velocidad de la desescalada en la comunidad, que cuenta este sábado con un porcentaje de pacientes COVID ingresados en las UCI del 45,6 por ciento, lejos aún del 25 por ciento deseado.

Según los datos actualizados del portal de Transparencia de la Junta recopilados, este sábado son 254 las personas ingresadas en las UCI por COVID, de un total de 556 camas habilitadas en estas unidades de críticos, que se encuentran a un 71 por ciento de ocupación por toda clase de patologías, ya que en la comunidad hay 393 personas en ingresadas en la UCI.

De este modo, aunque la ocupación COVID de las UCI casi dobla la cifra que se persigue, en esta última semana la mejoría ha sido evidente, al descender más de diez puntos este porcentaje que mide el número de personas ingresadas con COVID sobre el total de camas disponibles.

En cuanto a la situación de las plantas, tras conseguir el jueves el objetivo de dejar atrás el umbral del 15 por ciento de pacientes COVID en las plantas de los hospitales, en estos momentos son 3.622 las personas ingresadas por todo tipo de patologías en las 6.000 camas habilitadas (60 % de ocupación), mientras que, de ese total, 773 están ingresadas por COVID .

El índice de reproducción se estanca

Por otro lado, el índice de reproducción del virus (RT) ha experimentado desde los últimos días un estancamiento, al que la consejera de Sanidad, Verónica Casado, aludió como "valle", ya que lleva varias jornadas en torno a los 0,67 puntos, lo que implica que cien contagiados podrían infectar a 67 personas.

Así, este indicador revela a cuántas personas puede llegar a infectar a su vez un contagiado por COVID y es esencial que se mantenga por debajo de 1, algo que se consiguió hace días, aunque en provincias como Soria se acerca al 1 (0,95).

En cuanto a la Incidencia Acumulada, la actual tendencia descendente en el número de contagios de COVID coloca a Castilla y León fuera del riesgo extremo (nivel 4-granate) la próxima semana, que estaría en la barrera de los 250 casos por cien mil habitantes a dos semanas.

Con una incidencia acumulada en las dos últimas semanas en descenso, fijada hoy en 303 casos por cada 100.000 habitantes, y la de siete días también en bajada con 106 casos ponderados, Castilla y León mantiene su paso firme para, en pocos días, dejar de estar en riesgo extremo y situarse en registros por debajo de los 250 casos por cada 100.000 habitantes (a 2 semanas), ya que de mantenerse la tendencia la proyección marca que será de menos 240 casos la próxima semana.

De hecho, seis de las nueve provincias de la Comunidad -Ávila, Burgos, Salamanca, Segovia, Valladolid y Zamora- están ya por debajo del nivel de riesgo extremo si se observan los datos con la referencia de la última semana, mientras que se mantienen por encima (125 casos ponderados) Soria, con 293, Palencia (156) y León (130).