El sector hotelero ha sido duramente castigado por la crisis de la pandemia por el COVID-19 durante el año 2020 en el que se han cerrado el 40,3% de los establecimientos hoteleros de Castilla y León, lo que a su vez se ha traducido en más de 3.700 puestos de trabajo menos, el 59% del sector.

El número de establecimientos hoteleros a la finalización del año era de 707 en la comunidad frente a los 1.185 de un año antes, lo que constituye un 40,3% menos. Esta tendencia es idéntica en todas las provincias, con mayor o menor incidencia en cada una de ellas.