La Policía Local de León tramitó ayer una sanción a un establecimiento hostelero que contaba con clientes en el interior a la una menos cuarto de la madrugada, a lo que se sumó el incumplimiento de la normativa de prevención del COVID-19.

Los agentes se personaron en el bar y comprobaron que había gente en su interior, al tiempo que se cometían otras infracciones, de manera que la intervención policial se saldó con multas por tener clientes en el interior, seis por no utilizar mascarilla, cuatro sanciones por no tener distancia de seguridad, una por la organización del evento, una por no colaborar con la autoridad, otra por permitir fumar y una última por tener extintores caducados.