El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, confía en que la próxima semana se levanten las restricciones a la hostelería, centros deportivos y grandes superficies comerciales en las siete provincias que restan, como el viernes ya las abandonaron Ávila y Segovia. Sin embargo, se muestra prudente y apela a la evolución de la incidencia acumulada en los próximos días para determinar las medidas que se mantendrán o no. “Vemos la luz al final del túnel”, aseguró el jefe del Ejecutivo, en una entrevista concedida ayer a los servicios informativos de Castilla y León Televisión. A su juicio, “gracias a las restricciones adoptadas, al esfuerzo de la sociedad y al sacrificio de los sectores afectados” se está “superando la situación crítica que sufría la comunidad”. “Funcionan porque en las dos últimas semanas se ha reducido la incidencia al 50 por ciento, también el número de fallecidos, con lo que se salvan vidas, y también la ocupación en UCI y en planta”, insistió el presidente del Gobierno autonómico, quien considera que lo importante es “perseverar” en esas medidas eficaces e hizo un llamamiento a la población: “No tenemos que bajar la guardia ni ahora, ni en el puente, ni en Navidad. El virus está entre nosotros y tenemos que mantener la distancia, mascarilla, ventilación frecuente, etc.”, reiteró, para asegurar que la estrategia de antígenos “está dando los resultados esperados”.

También abordó en la entrevista el polémico decreto de sanidad para regular las condiciones laborales de los sanitarios, que “tiene un objetivo distinto de la reacción que ha provocado”, a pesar del “esfuerzo infructuoso por explicarlo”. “El decreto quiere proteger al sector y la negociación con los sindicatos. En dos semanas el decreto no ha alterado las condiciones laborales de los sanitarios. Tiendo la mano, con diálogo, para proteger a los profesionales, que estamos pendientes de ellos y celebraremos en próximos días reuniones para empujar la negociación”, insistió.Mañueco pidió también homogeneidad entre el Gobierno y las comunidades autónomas en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS) de esta próxima semana, en el que se tomarán medidas para Navidad, tanto en el horario del toque de queda como en el número limitado de personas en las reuniones familiares. “Más allá del número, lo importante es enviar el mensaje de que el encuentro familiar es una situación que genera riesgo. El 65 por ciento de las personas ingresadas en UCI se han contagiado en ámbito familiar a través de hijos. Da igual el número de personas, sino que lo hagan con seguridad y con cuidado”, insistió. “No tiene sentido el esperpento de que comunidades vecinas tomen decisiones contrarias. El Gobierno debe coordinar. Cuando nos escuchamos las cosas salen mejor”, aconsejó.

Ayer, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, invitó ayer a “regalar seguridad” estas navidades a aquellos que queremos para combatir el coronavirus y poder seguir “todos juntos mañana”. El jefe del Ejecutivo se dirigió a los ciudadanos, pidiéndoles que hagan “pedagogía” con familiares, amigos y conocidos y que les expliquen que para poder celebrar las fiestas de los próximos años resulta necesario una mayor distancia social en este fin del 2020. En el acto “La España que nos merecemos 2021-2026”, Pedro Sánchez reconoció que se ha producido un “descenso significativo de la tasa de contagios” -la incidencia está en 300-, aunque todavía está muy lejos de la cifra deseada de 25 personas por cada 100.000 habitantes.