El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha comprometido este viernes que su Ejecutivo negociará y ofrecerá al sector de la hostelería nuevas ayudas directas para superar la crisis del coronavirus y, aunque ha confiado en que haya un Plan de Choque nacional, con aportaciones de todas las administraciones, ha garantizado que la Junta las aprobará haya o no acuerdo con el Gobierno central.

En la rueda de prensa convocada para analizar negativamente la Ley de Educación aprobada en el Congreso, preguntado por la reunión que mantendrá la Junta con los hosteleros la semana que viene, Mañueco ha asegurado que este sector "se ha comportado con responsabilidad" y merece un "reconocimiento".

Con la reunión del lunes como referencia, pero sin detallar alguna de las propuestas que realizarán a los hosteleros para afrontar la desescalada de las restricciones actuales, Mañueco ha subrayado que pese a que no hay que "bajar la guardia", parece que existe una "leve tendencia" a la disminución de los contagio de COVID.

Ha destacado que la pasada semana la Junta anunció dos vías de ayudas a los sectores afectados por la crisis, entre ellos el hostelero y el turístico, con 83 millones en ayudas, algunas de ellas directas y el resto de financiación, y con un acuerdo con Iberaval para ofrecer créditos blandos y gratuitos a los empresarios.

No obstante, ha insistido en la necesidad de alcanzar un acuerdo con el Gobierno central para que se despliegue un Plan de Choque estatal para el que ha ofrecido una financiación repartida entre las diferentes administraciones, con el 50% aportado por el Ejecutivo central, el 35% por el autonómico y el 15% restante por las entidades locales.