La Junta de Castilla y León iniciará en “próximas fechas” la tramitación, en las Cortes Regionales, del anteproyecto de ley para la modificación de la Renta Garantizada de Ciudadanía (RGC) que permitirá que esta ayuda regional sea compatible con la percepción de otras ayudas y, concretamente, el Ingreso Mínimo Vital (IMV) del Gobierno de España. Así lo aseguró ayer Francisco Vázquez, para el que la medida del vicepresidente Pablo Iglesias es “pura política y publicidad”.

Vázquez lamentó que sólo se haya permitido a Navarra y el País Vasco la gestión autonómica del IMV. Motivo por le que la Junta de Castilla y León toma la decisión de modificar su ayuda, porque esta renta es incompatible con otras percepciones. Para Vázquez, esta medida el Ingreso Mínimo Vital ha resultado, finalmente, “superfluo y contraproducente” debido a su “nefasta gestión”, siendo un “desastre” para las 1.650 familias que pidieron el IMV, frente a las cerca de 9.200 que cobraban la Renta Garantizada.