Los contribuyentes de Castilla y León podrán acogerse a una nueva moratoria fiscal -la tercera- sobre el pago de impuestos autonómicos tras la nueva prórroga del estado de alarma. Así lo publica hoy el BOE, una medida que implica a más de 114.000 contribuyentes y se traduce en 120 millones de euros.

Con esta nueva prórroga, la Consejería de Economía y Hacienda extiende a tres meses sobre los plazos inicialmente fijados en la normativa aplicable el plazo de presentación y pago de los impuestos sobre Sucesiones y Donaciones, así como de Transmisiones Patrimoniales Onerosas y Actos Jurídicos Documentados de personas físicas, pymes y autónomos.

Castilla y León fue una de las primeras comunidades autónomas en aplazar los impuestos autonómicos tras la crisis sanitaria provocada por el COVID-19, con el objetivo de retrasar el pago de los mismos y facilitar liquidez al contribuyente y evitar posibles tensiones en tesorería para familias, pymes, autónomos y personas físicas. De esta forma se facilita una mayor capacidad de liquidez, al retrasar el pago de los impuestos, sin intereses, recargos ni penalizaciones.

Esta moratoria de los tributos autonómicos se extenderá si fuera necesario dado que la Junta mantiene su compromiso de seguir aplazando los impuestos propios mientras persista el estado de alarma.

Por otra parte, la Junta recuerda que los contribuyentes que necesiten efectuar algún trámite tributario durante el estado de alarma pueden efectuarlo de forma telemática en el portal tributario de la web del Gobierno Autonómico. Asimismo, se ha reforzado la atención telefónica en los Servicios Territoriales de Hacienda de todas las provincias, así como la atención a las consultas tributarias a través de correo electrónico: consultas.tributos@jcyl.es.