La Consejera de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Verónica Casado, informaba este martes de que la Consejería extenderá próximamente a toda la comunidad la realización de test de COVID-19 desde coches, aunque esto "dependerá en gran medida de los test que haya disponibles".

Así lo informaba en la rueda de prensa diaria sobre la incidencia del coronavirus en la comunidad la consejera de Sanidad, quien ha explicado que esta práctica, puesta en marcha por Cruz Roja en Salamanca, "pronto" se extenderá al resto de la comunidad.

No obstante, Casado ha subrayado que la práctica de estas pruebas de detección del virus desde vehículos, además de depender del número de test disponibles, dependerá de las posibilidades de organización de la recogida de estas muestras, ya que, como ha explicado la titular de Sanidad, centros de análisis de estas pruebas, como el de Majadahonda (Madrid), están saturados.

En este sentido, la Junta ha explicado que la comunidad está a la espera de recibir, antes del fin de semana, un "kit" con estas pruebas de detección rápida del coronavirus, que se destinarán a realizar los test a los pacientes hospitalizados, al personal sanitario y a los residentes en centros de mayores.

Y es que, como ha recordado la consejera, "de nada sirve" hacer los test a personas que están asintomáticas, de ahí que haya explicado que no todo el mundo tiene que hacerse la prueba de detección del coronavirus.

Sanidad de Castilla y León (Sacyl) instaló entre el lunes y ayer una carpa, con la colaboración de Cruz Roja, en el párking del centro de salud de Capuchinos, en Salamanca capital, para realizar test del coronavirus COVID-19, sin salir del coche, a los ciudadanos que cuenten con cita previa por tener la sospecha de haberse contagiado de la enfermedad.

Los test, conocidos como "COVID-auto", comenzaron a realizarse en el día de ayer, tal y como adelantó el lunes la consejera de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Verónica Casado, y solo se llevarán a cabo a aquellas personas que hayan sido citadas previamente desde la Gerencia de Atención Primaria y los centros de salud de Salamanca capital.

Así, el procedimiento comienza cuando, tras haber analizado los distintos casos sospechosos en virtud de las llamadas realizadas al teléfono facilitado para posibles casos de coronavirus, los profesionales sanitarios se ponen en contacto con los pacientes cuya sintomatología coincide con la de la enfermedad. Se les cita en la carpa instalada en el párking del centro de salud de Capuchinos a una hora determinada y, cuando pasan con el coche, y sin necesidad de salir del mismo, se les toma la muestra que permitirá determinar si están contagiados por el COVID-19 o no.

El objetivo de este servicio, en el que están apostados sanitarios de Sacyl en una carpa facilitada por Cruz Roja de 3x3, en cuyo interior hay una mesa, sillas y el aparataje necesario para hacer las pruebas, es agilizar la toma de muestras de posibles casos de coronavirus, si bien desde Sacyl aseguran que "no se trata de un test de detección rápida" del COVID-19 sino que es la muestra la que se toma de manera ágil y sencilla. Posteriormente, esa muestra se traslada al Servicio de Microbiología del Complejo Asistencial Universitario de Salamanca, donde se determina si el paciente tiene o no la enfermedad del coronavirus, y se deriva la conclusión a Atención Primaria, quien se lo comunica al interesado, en un proceso que dura en torno a 4 horas.