Castilla y León tendrá enfermeras de gestión a demanda, que ya funcionan en otras autonomías y que permiten descongestionar la Atención Primaria al resolver los problemas cotidianos de los pacientes dentro de sus competencias, y sólo si se requiere derivarlos al médico.

Este es uno de los compromisos de la consejera de Sanidad, Verónica Casado, en la reunión que ha tenido este viernes con el Consejo de Colegios de Enfermería de Castilla y León, según ha detallado a "Efe" al término del encuentro su presidente Alfredo Escaja.

Se trata de una reunión largamente demandada, ha recordado Escaja, quien ha mostrado su sorpresa por cómo se ha desarrollado, más positiva de lo que esperaban, ya que se han encontrado con una consejera receptiva con sus demandas y comprometida en el desarrollo del acuerdo de 2015, cerrado con el anterior consejero, Antonio Sáez.

Se trata de temas de desarrollo de las especialidades de enfermería, la citada gestión a la demanda, el papel de la enfermería con los enfermos crónicos, o potenciar los cuidados y visitas domiciliarias, y la continuidad asistencial entre primaria y hospitalaria.

Para su cumplimiento se pondrán en marcha grupos de trabajo, ha planteado la consejera a los Colegios de enfermería de la comunidad, a los que ha pedido que "le den tiempo".

En este paquete se enmarcan las enfermeras de gestión a la demanda, un "puesto de trabajo que se va a crear" y que supone que si un enfermo requiere un servicio y no tiene cita ese día puede contar con la atención de la enfermería que lo tratará dentro de sus competencias e incluso le dará el alta o si lo requiere lo derivará a un médico.

Es un puesto que existe desde hace doce años en comunidades como Cataluña y que en una década ha logrado reducir la "presión asistencial" en Primaria un treinta por ciento, ha recordado Escaja.

Otra de las reivindicaciones del Consejo era contar en el organigrama de la Consejería, como ya sucede en otras autonomías, con una dirección técnica para cuidados.

En ese punto, la consejera ha respaldado y apoyado esa pretensión, que ha intentado atender aunque depende de función pública de la comunidad, que está en la Consejería de Presidencia, que afirma que no es posible ya que la enfermería tiene categoría A2 y para tener una dirección técnica se necesita A1.

Escaja ha asegurado que la consejera cree "injusto" que no puedan tener ese departamento, les ha trasladado su respaldo para reclamar en función pública que pasen a tener este nivel, ser considerados como los médicos o farmacéuticos, y poder contar con una dirección técnica en el organigrama de la Consejería.

En cuanto al plan de reforma de la sanidad rural, Escaja ha defendido el papel de la enfermería en el medio rural, donde no cree que sean necesarios más médicos sino más enfermeras realizando su papel de enfermera.