Cuando llegan las elecciones resultan recurrentes las quejas sobre el reparto de escaños con la Ley Electoral actual, que aplica el sistema D'Hont, que sitúa al nuevo partido Por Ávila (XAV) como el que menos votos ha necesitado para traducirlos a un escaño, mientras que Vox ha sido el caso opuesto.

De este modo, Por Ávila ha sido el que más ha optimizado sus 9.447 votos, exclusivamente en la provincia abulense para conseguir su único representante en las Cortes de Castilla y León, la cifra más baja de entre los que han conseguido acceder.

En el lado contrario y como ya le sucedió en las elecciones generales del 28-A se sitúa Vox, que pese a obtener 75.331 votos a nivel autonómico -frente a los 9.305 de 2015-, sólo ha conseguido uno por la provincia de Valladolid, donde ha necesitado de 20.172 sufragios.

A nivel autonómico, el PSOE ha sido el segundo partido que más ha optimizado sus 477.925 votos al traducirlos en 35 escaños.