Los padres de la bebé detenidos en agosto de 2017 en Valladolid por abusar de su bebé, de tres meses, y utilizarla para grabar un vídeo pornográfico han ratificado hoy el acuerdo que les llevará a permanecer en prisión por espacio de diez años cada uno, frente a los catorce que inicialmente solicitaba para ellos el Ministerio Fiscal.

Un cruce de denuncias en su pelea por la custodia de la hija, a la que, además, se le detectó una intoxicación de cocaína durante un examen médico, han pactado una condena de diez años y un día de cárcel por un delito de abusos sexuales sobre la pequeña en concurso medial con otro de utilización de la menor para la elaboración de material pornográfico.

Conforme a lo previsto, el juicio se ha celebrado a puerta cerrada, aunque simplemente ha consistido en las comparecencias de los dos agentes de la Policía Nacional que intervinieron en la detención de la pareja y en el testimonio de otro, perteneciente a la Brigada de Policía Científica, que procedió al volcado del material del teléfono móvil del acusado, en los dos casos únicamente para ratificar sus respectivos informes, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas.

La vista ha concluido después de que los dos acusados ratificaran la sentencia de conformidad pactada con la acusación pública, consistente en diez años y un día de prisión por un delito de abusos sexuales en concurso medial con otro de utilización de menor para la elaboración de material pornográfico.

Además, el padre y la madre de la niña asumen 13 años de alejamiento de la niña y la imposibilidad de comunicar con ella, inhabilitación por espacio de 15 años para el ejercicio de profesión u oficio que implique el contacto con menores, la pérdida de la patria potestad de la pequeña y cinco años de libertad vigilada y la participación en programas de educación sexual, así como, en concepto de responsabilidad civil, el pago, de forma conjunta y solidaria, de 20.000 euros en favor de la víctima por daños morales.