, Ical

Castilla y León, bastión de la ahora conocida como España "vaciada", se convierte en esta campaña en el centro del tablero político nacional. Los 31 diputados y 36 senadores que eligen las distintas provincias de la comunidad aparecen como decisivos para la próxima conformación de mayoría en las Cámaras legislativas y, por lo tanto, en quien será el próximo inquilino de La Moncloa.

Todos los sondeos publicados otorgan la posibilidad de que cinco formaciones - PP, PSOE, Podemos, Ciudadanos y Vox - obtengan representación en Castilla y León y, por primera vez desde los años 90 del siglo pasado, apuntan a que los socialistas tienen posibilidad de obtener la victoria en algunas provincias debido a la fragmentación del voto de la derecha y a la llamada al voto útil de la formación de Pedro Sánchez.

Este escenario agudiza la pelea por el voto en Castilla y León. De ello son conscientes los estrategas de los partidos que no han escatimado esfuerzos en la precampaña más intensa y larga que se recuerda, con una presencia inusitada de líderes nacionales en el territorio, especialmente de los dos partidos tradicionales: Pedro Sánchez ha visitado todas las provincias menos Soria, mientras que a Pablo Casado le falta Segovia. Los dirigentes más conocidos de Podemos no se han dejado ver en las últimas semanas por la comunidad, mientras que Rivera, en pleno epicentro de la polémica por las irregularidades en su proceso de primarias autonómico, ha protagonizado un solo acto, organizado por "Ical", en el que formuló una de las propuestas más claras de las que se han escuchado a los partidos: la rebaja del 70 por ciento del IRPF para los vecinos del medio rural. Santiago Abascal ha iniciado su periplo en Palencia y en pocos días continuará con grandes actos en Burgos y Valladolid.

También, este tablero ha provocado que, por primera vez en muchos años, los problemas del mundo rural y la España interior hayan cobrado protagonismo frente a otros asuntos de calado nacional, como la crisis catalana.

Desde el "Haz que pase" de los socialistas, al "Valor seguro" del PP; desde "La historia la escribes tú" de Podemos, al "¡Vamos, Ciudadanos!", a los que se suma el "Por España" de Vox. Éstos son los lemas de esta lucha electoral que finalizará en la cita de las urnas del 28 de abril en la que los partidos tratarán de retener a sus votantes y convencer a la bolsa de indecisos.

A estos lemas se une el tradicional argumentario político en el que sobresalen cuestiones muy vinculadas con Castilla y León, como el futuro del campo y el medio rural, la Política Agraria Común, la sostenibilidad de la sanidad y los servicios públicos y un "clásico", las pensiones. También está sobre la mesa el modelo autonómico, la reindustrialización y los retos de futuro de la energía junto con el sector del automóvil.

Los populares estarán a "pie de calle" para presentarse a la sociedad y dar a conocer sus propuestas, tras una precampaña "intensa" con Pablo Casado, mientras que los socialistas apuestan por un programa en clave autonómica, tras la gira de Pedro Sánchez, aunque recorrerán la comunidad con un importante número de ministros.

Podemos apuesta en esta campaña por actos de cercanía en su mayoría, frente a los grandes mítines. Los "morados" se decantan por una campaña "por y para la gente" que incidirá en la calidad del empleo, el impulso de los servicios públicos, la erradicación de la brecha salarial y laboral de las mujeres.