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La recaudación tributaria del Estado en Castilla y León durante el año 2018 registró un comportamiento positivo alentada sobre todo por el consumo interno y los rendimientos del trabajo, por el aumento del empleo. En concreto y según los datos recogidos por "Ical", de la Agencia Tributaria, los ingresos tributarios ascendieron el año pasado en la comunidad, a 4.203,7 millones de euros, lo que supone un aumento del 5,1 por ciento respecto al ejercicio anterior.

Por provincias, la recaudación global de tributos por parte del Estado mermó en Burgos (878,82 millones de euros), un 5,5 por ciento; y en Ávila (136,52 millones), un 1,9 por ciento. Por el contrario, se elevó en Valladolid (1.238,76 millones de euros), un 17,8 por ciento; en Soria (174,23 millones), un 12,8 por ciento; en Segovia (254,46), un 6,1 por ciento; en Zamora (166), un 5,6 por ciento; en Palencia (297,17), un 5,2 por ciento; en Salamanca (488,59), un 1,8 por ciento; y en León (569,14), un 0,9 por ciento).