Las Cortes de Castilla y León dieron ayer luz verde a la implantación y desarrollo de la carrera profesional de los empleados públicos de la Administración de la Comunidad, cuya convocatoria se producirá en diciembre de 2019 para su resolución en 2020 con una dotación mínima de 75 millones, siempre vinculado a la disponibilidad de recursos. El texto se aprobó con los votos de PP y Cs -llegaron a un acuerdo en Comisión- y en contra de PSOE, Podemos e IU, sin recoger ninguna de las 77 enmiendas defendidas por los procuradores de la bancada de la izquierda naranja, y con un cruce de reproches entre los 'populares', acusados de "electoralismo", y la oposición, criticada por no haber llegado a un acuerdo y mantener su "corta y pega" de las propuestas de máximos de los sindicatos.

"Dicho y hecho", afirmó Alfonso Fernández Mañueco en la presentación de la norma, que ya anunció el pasado mes de noviembre y valoró que sale una "buena ley" para los empleados y los servicios públicos de la Comunidad. "Es una ley pionera", calificó el dirigente popular, que afirmó que se "da un paso más" y se apuesta por la estabilidad en el empleo público. Fernández Mañueco destacó que se mejora el texto en colaboración con Ciudadanos, recordó que se contempla una dotación de al menos 75 millones de euros anual en el presupuesto -en la transacción se condiciona a que los recursos sean los suficientes- y subrayó que la convocatoria será antes de que termine este año 2019.

En el debate de sus 23 enmiendas, el socialista José Francisco Martín manifestó que finaliza "este esperpento", recordó que el texto nació de un WhatsApp del PP para "quitarse de en medio las reivindicaciones de los veterinarios" y subrayó que el 80 por ciento de los empleados públicos no están de acuerdo con lo presentado. "Son ocho artículos, autoenmendados con seis enmiendas", siguió Martín, que insistió en que la carrera profesional la pondrá en marcha el PSOE desde el Gobierno de la Comunidad a través de una ley consensuada con los agentes sociales. "¡Vayan preparando unas oposiciones!", recomendó a Fernández Mañueco y a Raúl de la Hoz. El popular Raúl de la Hoz recriminó a Martín que no defendiera las enmiendas "copia y pega de máximos de los sindicatos" y censuró que se haya aprobado la carrera profesional para el colectivo de los veterinarios mientras se vota en contra de lo mismo para 82.000 empleados públicos de la Comunidad. "Ni dignidad, ni lucidez y quedarán retratados ante los empleados públicos", afirmó.