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Las Cortes de Castilla y León aprobaron ayer una iniciativa de Cs que pide la continuidad de los centros de educación especial, ante la posibilidad planteada por el Gobierno de avanzar hacia una integración progresiva de los alumnos de estos centros en colegios ordinarios. En la votación han sumado sus votos el PP, el PSOE, Podemos, Ciudadanos y UPL, mientras que IU se ha abstenido. Ha sido el viceportavoz de Cs, David Castaño, quien ha defendido ante el Pleno de las Cortes la proposición no de ley, surgida a raíz de los cambios anunciados por el Ministerio de Educación en la ley educativa, que busca una mayor inclusión de los alumnos con necesidades especiales en los centros ordinarios.

Además, las Cortes de Castilla y León han aprobado por unanimidad instar a la Junta a que exhorte al Gobierno de España a incorporar a las contratas y subcontratas dependientes de empresas energéticas al Acuerdo Marco para una Transición Justa de la Minería del Carbón. Durante el debate se produjo un momento tenso, cuando desde la bancada socialista su procurador Pedro González ha proferido un insulto en contra el portavoz del Grupo Podemos, Pablo Fernández, cuando ha escuchado cómo el socialista le ha llamado "imbécil de marca mayor". La propia presidenta de las Cortes, Silvia Clemente, haya rogado al socialista que retirara el insulto.