El consejero de Educación, Fernando Rey, recordó ayer en Valladolid que el profesor de la segunda etapa de Infantil está para educar y no cambiar pañales, en la línea de lo expresado hace unos días por el nuevo Procurador del Común, Tomás Quintana, quien pidió que se creara un protocolo de actuación para dar respuesta a los supuestos de los padres que no pudieran acudir a los centros educativos para atender la higiene de sus hijos.

En todo caso, Rey defendió la solución que han adoptado algunas asociaciones de madres y padres (Ampas) que, ante la imposibilidad de acudir al centro a realizar estas labores, han contratado un cuidador para que lleve a cabo este servicio. "Nos parece algo razonable que los padres se organicen cuando no pueden atender las necesidades de sus hijos", consideró.

El consejero precisó que "lo normal" es que los niños mayores de tres años controlen los esfínteres, por lo que es una situación que ocurre solo en contadas ocasiones. Añadió que, en la actualidad, ante un "accidente biológico" de un niños, el centro avisa a los padres para que vengan al centro para cambiarle de ropa.

"A veces, lo que ocurre es si los padres o algún familiar cercano no pueden acudir al colegio, el propio profesor cambia al menor, sin que esté obligado a hacerlo. No tenemos la percepción de que los niños estén todo el día mojados o manchados, en una situación infrahumana", aseveró.

El Procurador del Común abrió una investigación después de la queja de los padres de un alumno de un centro rural agrupado (CRA) de la provincia de León, que tenían un hijo que acudía al colegio con pañal.

Por otra parte, Rey reconoció la dificultad, en muchas ocasiones, para encontrar un relevo a los directores de los institutos en la comunidad. "Cuesta dar ese paso, porque más que un cargo es una carga y es complicado encontrar profesores que estén dispuestos a realizar muchas horas extra», dijo.