La unión empresarial que nace ahora para tratar de buscar estrategias conjuntas antes realidades similares tiene un precedente político en la macrorregión RESOE, integrada por las comunidades autónomas de Galicia, Castilla y León, Asturias, Cantabria y la Región Norte de Portugal, que nació en 2010 para hacer presión ante la Unión Europea a favor del Corredor Atlántico y también para hacer más estrecha la relación grandes áreas de actividad de alto valor añadido: transportes y logística, competitividad industrial centrada en el sector de la automoción y excelencia en la enseñanza superior e investigación.

Las ocho provincias españolas, cuyas patronales dan ahora dan un paso más para potenciar las estrategias de colaboración empresarial, reúnen, a juicio de los expertos, un sector industrial "muy complementario", grandes posibilidades crecimiento en nuevas tecnologías y servicios avanzados, y un sector agroalimentario con un amplio margen de desarrollo. En materia turística aunque la oferta de esos ocho territorios puede parecer similar, la colaboración también ofrece "más beneficios que perjuicios", según los analistas.