La Consejería de Educación asignó a los profesores interinos del Cuerpo de Secundaria un total de 3.495 vacantes, lo que supone el 99 por ciento de las plazas ofertadas para este curso, con un resultado "muy satisfactorio" pese a reconocer que hubo "problemas" y "equivocaciones". De este manera, los institutos de la Comunidad comenzaron el curso el 17 de septiembre con la práctica totalidad del profesorado incorporado a sus destinos.

El director general de Recursos Humanos de la Consejería, Jesús Manuel Hurtado, destacó que este año se ha producido la tasa más alta de todos los procesos informatizados de adjudicación de vacantes y sustituciones para los docentes que imparten Secundaria y Formación Profesional, realizados desde la asunción de competencias en materia educativa.

En cuanto a la baremación de la listas de interinos para el curso 2018-2019 y tras superar los problemas informáticos que motivó la publicación de tres listados -algunos con "errores importantes por no cruzarse datos- y uno último depurado (3 de septiembre), Hurtado destacó que el resultado fue "muy satisfactorio", donde ha primado la transparencia. Valoró la labor de las comisiones de baremación en todas las provincias para comprobar la "ingente" documentación de 13.901 aspirantes, hasta sumar 42.407 expedientes.

Ha habido muchos recursos administrativos, al superar el millar, pero solo se estimaron unos 350. Tranquilizó a los interesados al recordar que la Junta notificará la resolución a todos, aunque ha priorizado los que eran de estimar y, luego, tocará el turno a los desestimados.

Pese a reconocer algunas equivocaciones, el director general de Recursos Humanos consideró que no han tenido "repercusiones reales" porque los interinos elegían un mes después. También quiso salir al paso de algunas críticas sobre las pruebas al asegurar que los criterios de evaluación son exclusivos del tribunal, en los que la Consejería no se inmiscuye. Por otro lado, destacó la transparencia "máxima" en todo el proceso con todo tipo de garantías para los aspirantes que, por ejemplo, pueden presentar alegaciones en cualquier fase o acceder a los expedientes de otras personas.