Unicaja Banco firmó ayer la escritura de fusión por absorción de su filial EspañaDuero, lo que supone la culminación del proceso, tras la obtención de las autorizaciones de los reguladores correspondientes, y conforme al proyecto de fusión redactado por los consejos de Administración de ambas entidades, y aprobado por sus respectivas juntas generales de accionistas el pasado abril, según informó la entidad, tras comunicarselo la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

La efectividad jurídica de la fusión se producirá tras la inscripción de la escritura de fusión en el Registro Mercantil, lo que se prevé que se produzca el próximo viernes, 21 de septiembre. A partir de ese momento, se producirá la integración en Unicaja Banco de EspañaDuero bajo un esquema único de gestión y gobernanza que, como estaba prevista en su Plan de Negocio.

Esta medida, según Unicaja, permitirá continuar avanzando en la "mejora de la eficiencia", manteniendo la "solvencia" y "solidez" financiera, "cercanía", vinculación a los territorios de origen y servicio al cliente, que aseguró han caracterizado tradicionalmente al Grupo. Asimismo, añadió que la fusión representa una "oportunidad de generación de valor" para los clientes, accionistas y empleados de las entidades y supone culminar una operación con la que Unicaja Banco ha contribuido de manera significativa a la estabilización del sistema financiero español.