El presidente de asociación de consumidores Facua Castilla y León, Jesús Ulloa, denunció ayer que dentro de las cajas de ahorros existían "intereses muy espurios" con préstamos a empresarios y partidos que "se metían en la partida de incobrables" por lo que tenían "la sensación" de que "se estaba expoliando" las entidades.

A su entender, los integrantes de los órganos ejecutivos de las cajas "no eran tan honrados" porque "había muchos intereses" y recordó que su organización ya denunció en 2006, ante la Consejería de Hacienda, prácticas como la de la candidatura de Pedro Conde en Caja España, que "ofrecía 100 euros a las puertas de la Asamblea General para quien le votase". "Nunca nos contestaron", dijo. "Aquella forma de formación de los consejos de administración era muy deleznable y entró demasiada gente con intereses económicos espurios", resumió.

Ulloa denunció que las cajas desaparecieron porque "todos estaban cerrando los ojos de lo que estaba pasando", tanto el Banco de España, como los gobierno autonómicos y los sindicatos mayoritarios, CCOO y UGT, como si "hubiese una orden desde arriba", desde la gran banca, para que se liquidaran las entidades de ahorros.

Jesús Ulloa, que compareció ante la Comisión de investigación de las cajas en las Cortes, aseguró que "se pasaban la pelota de unos a otros y al final la pelota acabó en la papelera". "Nadie nos hacía caso", dijo, para sentenciar que hubo "intereses de alguien o de algunos grupos" para hacerse con el control del 50 por ciento de los ahorros de los españoles que mantenían las cajas.

El representante de consumidores, con 30 años al frente de la organización, razonó que las cajas de ahorros tendrían que haber desparecido por una decisión de los impositores pero lo hicieron "porque lo asumieron partidos políticos y sindicatos".

Ulloa constató que las entidades de ahorros entraron "en el juego" para competir con los bancos en la "burbuja inmobiliaria"que se estaba creando e "iba a reventar", con préstamos sin buenas valoraciones o por encima de lo que valía la vivienda. Al respecto, sentenció que "entraron en este juego por la decisión de políticos y sindicatos mayoritarios, que lo permitieron cuando lo debían haber parado".