La lucha contra el fraude de la Inspección de Trabajo en Castilla y León ha logrado que desde el año 2012 afloren un total 30.240 empleos sumergidos -4.393 en los diez primeros meses de este año, y que 17.182 contratos pasaran de temporales a indefinidos, cifra que en lo que va de año se ha incrementado un 3,4 por ciento con relación a 2016, cuando se alcanzaron los 3.447.

Estas cifras fueron ofrecidas ayer antes del inicio de la Comisión Autonómica de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, a la que asistió el consejero de Empleo de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, quien también destacó que en 2018 se incrementarán las actuaciones de la Inspección de Trabajo en la comunidad un 3 por ciento, hasta las 43.700, en prevención de riesgos laborales, empleo y relaciones laborales, Seguridad Social, economía irregular y trabajo de extranjeros.

Carriedo indicó que en el área de relaciones laborales se prevén 8.753 actuaciones, el 46 por ciento del total de las 19.000 que corresponden a la Consejería de Empleo, y el resto a prevención de riesgos laborales.