El presidente de la Confederación Hidrográfica del Duero, Juan Ignacio Diego Ruiz, confió ayer en que las lluvias que han comenzado a registrarse en Castilla y León den paso a un nuevo periodo con más precipitaciones, habitual del otoño, y pongan fin a la sequía. De momento, aseguró que no se han elevado las reservas de los embalses, aunque admitió que pueden servir para que se puedan llevar a cabo determinadas labores en el campo que se habían visto paralizadas.

En ese sentido, Diego, que abrió una jornada sobre el proyecto "Aquamundam" en Valladolid, destacó que las lluvias de momento ha sido "escasas" en la comunidad, si bien recordó que la campaña de riesgo ya está terminada. Para la próxima, el presidente de la CHD aseguró que durante el mes de febrero o marzo del próximo año se adoptarán, si fuera necesario, las medidas para la siguiente temporada.

De momento, el presidente del organismo regulador aseguró que no existen problemas de abastecimiento en la demarcación del Duero por las escasas reservas de los embalses.