El ingeniero en física nuclear y director del laboratorio independiente francés de medición radiactiva CRIIRAD, Bruno Chareyron, ha alertado de que las explotaciones de uranio disparan la radiación hasta 5.000 veces por encima de lo normal en lugares del mundo tan dispersos como Francia, Nigeria, Gabón, Namibia, Malawi y Brasil, y ha pedido parar la proyectada en Retortillo (Salamanca).