La Diócesis de León informó hoy de que el párroco de Vilecha, Tornero y Ribaseca, Carlos de Francisco, presentó ayer su renuncia al cargo de administrador de esas parroquias, por lo que -tras ser ceptada por el obispo Julián López- ha cesaso ya en sus obligaciones pastorales en las mismas.

Al quedar vacantes, se está a la búsqueda de una solución para que puedan ser atendidas adecuadamente, teniendo en cuenta las dificultades reales que existen, debido al envejecimiento del clero y a la escasez de vocaciones, señalan desde el Secretariado de Comunicación Social de la Diócesis en un comunicado.

En el mismo se lamenta “que se haya llegado a esta situación de tensión, cuando se supone que todos participan de la misma visión cristiana de la vida parroquial”.

Cabe recordar que los vecinos de la localidad de Vilecha, en el municipio de Onzonilla, acordaron en una reunión del concejo de la localidad, convocar para el domingo a las 12.30 horas una protesta ante la puerta de la iglesia y una recogida de firmas para destituir al párroco, del que denunciaron su “nula implicación” en los actos parroquiales y le acusaron de actuar con “despotismo”.