Las limitaciones en el censo hizo que se produjeran momentos de tensión en la sede del PP leonés ya que a las 21.00 horas, cuando debían cerrarse las urnas, quedaban numerosos afiliados que no habían podido ejercer su derecho. Algunos militantes denunciaron a voces que la culpa de ese retraso eran las numerosas trabas que los interventores llegados desde Salamanca estaban poniendo a los afiliados para poder votar reclamando en muchos casos documentación innecesaria. Al respecto el presidente provincial del PP, Eduardo Fernández, abogaba por la unidad de criterios y que las cuotas sean iguales en todos los sitios. "Honra a Silván la prudencia y mesura que ha tenido en todo este proceso", recalcó. Admitió que es lógico que la militancia leonesa esté molesta con el proceso y, tras felicitar a Mañueco valoró el esfuerzo de Silván por trasladar "la voz de los militantes de León a un proyecto autonómico", y señaló que la militancia leonesa se siente orgullosa de su candidato.

Por último, pedía que PP leonés esté bien representado en la estructura del partido a nivel regional y abogó por hacer "un esfuerzo de ilusión para tender puentes" y evitar agravios territoriales.

"Quien tenga la responsabilidad de llevar las riendas del partido tiene que tener esto muy presente, y a la vista de lo que sienten los militantes de este provincia algunos de esos puentes están algo tocados", advirtió.