El presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, comprometió ayer su "neutralidad más exquisita" en el proceso de elección del nuevo líder del PP de Castilla y León, después de su renuncia tras quince años en el cargo y al que concurrirán los alcaldes de León y de Salamanca, y defendió que la bicefalia no tiene porqué suponer un riesgo: "Hasta en los toros se torea al alimón".

Después de que el jueves se conociera que no acudirá a un quinto mandato en el PP y que Antonio Silván y Alfonso Fernández Mañueco presentarán ayer por la tarde los avales para ser precandidatos, Herrera respondió a algunas preguntas tras la firma de cinco acuerdos con los agentes del diálogo social.

"Mi estado de ánimo es espléndido", proclamó, para asegurar, por si alguien lo "duda" que mantendrá una "exquisita neutralidad" en el nuevo proceso y entre los dos aspirantes, de los que afirmó que "políticamente se han criado en mis pechos, si se permite la expresión". Herrera defendió que era "preferible" que diera un paso atrás porque no se ha ocupado del partido en los dos últimos años y tampoco iba a hacerlo, ya que para él es prioritario su compromiso con los ciudadanos.

El presidente respondió las primeras preguntas -por surgir en un "ámbito en que no se siente cómodo"- con evasivas sobre su decisión al manifestar que no tiene "opinión" sobre la decisión adoptada, pero ironizó con que se ha "mirado al espejo y ha estado de acuerdo", para añadir que no tenía nada que decir si se le preguntaba por los dos precandidatos. "Es ocioso que repita los argumentos", indicó en relación a la carta remitida a Mariano Rajoy en la que explica por qué no se presenta a la reelección.

Ante nuevas preguntas, manifestó que en la Junta Directiva del pasado 24 de febrero hizo "autocrítica", cuando reconoció que no había prestado todo el tiempo al partido en los dos últimos años y pidió a sus compañeros una reflexión de si, en esas circunstancias, que no iban a cambiar, era bueno compatibilizar ambos cargos.

"De aquí a 2019 voy a dedicar todo el tiempo y el esfuerzo al Gobierno y al compromiso con los ciudadanos", remarcó, de ahí que haya "preferido" dar un paso atrás en el partido y considerar que el "momento natural" era con la convocatoria del congreso. Herrera declinó responder a sí Mariano Rajoy le ha pedido que siguiera como presidente del PPCyL - "pregunte al presidente de mi partido", apostilló- y, sobre su posición en este proceso, recalcó su "neutralidad más exquisita" por si hay "alguna duda". "Yo participaré en el proceso, votaré, y seguramente tendré que votar en blanco, como es lógico; pero, en fin, todavía habrá alguno que me exija enseñar la papeleta", explicó.

"Son personas a las que quiero y en todas sus responsabilidades institucionales y orgánicas creo que he tenido algo que decir y eso es una demostración de cariño, de confianza, de aprecio, de afecto", afirmó. Más aun, confesó, "frente a alguna bobada que se ha escrito en los últimos días" en medios nacionales, que fue él quien pidió a Rajoy que Antonio Silván entrara en el "selecto club" del Comité Ejecutivo Nacional.

Ante la nueva situación que se abrirá a partir de abril con un presidente de la Junta y otro en el PP, Herrera defendió que sea así, cuando él no se iba a ocupar del trabajo orgánico, y preguntó si existe algún problema en el País Vasco, para, tras indicar que se podrá decir sí es mejor o peor, espetar: "Hasta en los toros se torea al alimón".

"Es preferible la bicefalia a no tener ninguna cabeza", observó. Con esa frase se refirió a "alguna valoración" expresada el jueves, tras conocerse su renuncia, relativa a que en el PP "no existe una persona de la talla de Herrera" -como declaró Pablo Fernández (Podemos)-.