La mayoría del profesorado apoya que la evaluación final de sexto de Primaria o "reválida" se realice con una muestra representativa y no de forma censal, con el objetivo de mantener su carácter diagnóstico. Un 82,4 por ciento participó en esta iniciativa de la Consejería de Educación y un 65,9 por ciento de los encuestados apoyaron que se lleve a cabo a partir de la selección de un grupo de alumnos. El sindicato STECyL-i destacó en un comunicado que los docentes le han vuelto a decir "no" al consejero Fernando Rey sobre la necesidad de llevar a cabo esta evaluación por considerarla "innecesaria desde parámetros pedagógicos y porque una evaluación de fin de etapa como ésta no tiene carácter diagnóstico". También criticó que Educación se dirigiera a los centros sin comunicarlo a la Mesa Sectorial. Por otra parte, el sindicato apuntó que si el consejero se suma a la "moda de las consultas" debería consultar al profesorado sobre los salarios.