La Junta de Castilla y León aprobó ayer, en la reunión del Consejo de Gobierno, el límite de gasto no financiero para 2017, que se sitúa en 9.159,83 millones de euros, un 2,8 por ciento más que el pasado ejercicio, lo que se traduce en 249 millones más que en 2016 y en 177 millones por encima de las entregas a cuenta provisionales comunicadas por el Gobierno central.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, la consejera de Economía y Hacienda, Pilar del Olmo, explicó los detalles del techo de gasto para 2017, que se remite ahora a las Cortes para su aprobación. Del Olmo afirmó que es el más alto desde 2012 y confió en que "concite" el apoyo de los grupos, porque, en caso de que no fuera así, advirtió de que no habría presupuesto y se seguiría con la prórroga.

El límite de gasto no financiero, aprobado ayer, se asienta en un crecimiento del 2,5 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) en 2017, una tasa de paro del 14,1 por ciento, la creación de 21.105 empleos (equivalentes a tiempo completo) y un déficit público del 0,6 por ciento. La consejera recalcó que se respetan todas las exigencias de estabilidad presupuestaria, como la regla de gasto (2,1 por ciento), déficit y deuda pública (19,8 por ciento). Del Olmo explicó que el límite de gasto se ha calculado con una estimación de las entregas a cuenta conforme al Plan Presupuestario modificado que envió el Gobierno a Bruselas, donde se recoge un aumento del 4 por ciento del PIB nominal con una recaudación y evolución positiva de la actividad económica. Es por ello que consideró que "no tiene ningún sentido" que en las entregas a cuenta comunicadas en octubre se reflejará una reducción, cuando la previsión económica es mayor.

Con esa estimación al alza debido a la actividad económica, Hacienda prevé la llegada de 6.031,28 millones del modelo de financiación (entregas a cuenta), un 2,02 por ciento más; 1.173,87 millones de fondos de la Unión Europea (PAC, FSE, Feder y Feader), un 2,07 por ciento más; 578,55 de transferencias del Estado sobre las que tienen seguridad por ser compromisos, un 2,67 por ciento más; y 1.042,60 millones de otros ingresos (tributos cedidos), un 5,80 por ciento menos.

Confió, por último, en que el límite de gasto sea aprobado por las Cortes y advirtió de que de no ser ratificado no se podrían aprobar los presupuestos y se seguiría con la prórroga.