El déficit de Castilla y León se situó en el mes de julio en el 0,15 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB), con unas necesidades de financiación de 82 millones de euros, cuando el límite para todo el ejercicio es del 0,7 por ciento. El pasado año, la comunidad presentaba en el séptimo mes del año un desajuste de 400 millones, que representaba el 0,74 por ciento del PIB, según recoge los datos difundidos ayer por el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas.

Las administraciones autonómicas redujeron su déficit en un 90,3 por ciento en los siete primeros meses del año, con un resultado negativo de 830 millones. En términos de PIB, el déficit autonómico se sitúa en el 0,07 por ciento en julio frente al déficit del 0,8 por ciento registrado en el mismo periodo de 2015. Esta evolución se debe, entre otras causas, a la liquidación definitiva de 2014 con un saldo a favor de las comunidades de 7.666 millones, mientras que la liquidación definitiva de 2013 resultó a favor de las mismas pero por importe de 1.750 millones.

En total, siete autonomías registraban superávit en el periodo enero-julio. Castilla y León acumuló unas necesidades de financiación 82 millones, tras recibir 363,8 millones de la liquidación de 2014. El límite de déficit público de las autonomías para este año se sitúa en el 0,7 por ciento.

Entre enero y julio, el déficit consolidado de las administraciones públicas, excluyendo las corporaciones locales, fue de 34.484 millones, equivalente al 3,09 por ciento del PIB. Esta cifra excluye el saldo neto de las ayudas a instituciones financieras, que a finales de julio presenta un importe negativo de 1.959 millones. En julio se efectuó la liquidación definitiva del sistema de financiación de las Administraciones Territoriales correspondiente al 2014, que ascendió a 8.589 millones de euros, 7.611 millones más que la liquidación abonada el año pasado.

Seguridad Social

La Administración Central registró un déficit de 27.791 millones a finales de julio, lo que equivale al 2,49 por ciento del PIB, excluyendo la ayuda financiera. Los Fondos de la Seguridad Social obtuvieron un déficit de 5.863 hasta julio, equivalente al 0,53 por ciento del PIB. Hacienda destacó la evolución de los ingresos por cotizaciones sociales con un crecimiento del 3,2 por ciento hasta julio, triplicando la tasa registrada en el mismo periodo de 2015 cuando el crecimiento de las cotizaciones se situaba en el 1,1 por ciento.

El déficit aumentó en 0,33 puntos de PIB en comparación con el año pasado, consecuencia del menor superávit registrado en el Servicio Público de Empleo estatal. El descenso del superávit se debe a las menores transferencias recibidas del Estado para financiar las prestaciones por desempleo, por la favorable evolución del mercado de trabajo.

El Estado registró un déficit en agosto de 31.091 millones de euros, 4.313 millones más que en el mismo periodo de 2015. El incremento en el déficit en el Estado se explica íntegramente por la liquidación del sistema de financiación de 2014 efectuada en julio, que aumenta en 7.611 millones respecto a la liquidación realizada el año pasado.

Excluyendo el efecto de la liquidación en ambos años, el déficit del Estado caería un 12,8 por ciento interanual en agosto. En términos de PIB, el déficit es equivalente al 2,79 por ciento, que es el resultado de unos recursos que ascienden al 9,59 por ciento del PIB y de unos empleos que suponen el 12,37 por ciento del PIB.