Cada euro de dinero público invertido por la Junta de Castilla y León en los centros especiales de empleo de la Comunidad, hasta 196, produce un retorno económico de 1,7 euros, por encima de los 1,4 euros que se generan de media en el conjunto nacional.

Estos datos reflejan la "buena solidez financiera" de esos centros especiales de empleo, que dan trabajo en la Comunidad a 4.683 trabajadores con discapacidad, según el estudio que sobre su presente y futuro se ha realizado en la Comunidad con el apoyo de la Junta y el sector.

El estudio, que ha servido de punto de partida a una jornada sobre el "reto de la competitividad" al que se enfrentan estos centros especiales de empleo, recoge que el 63% de esos centros tienen más del 59,8% de sus trabajadores con discapacidad con contratos indefinidos.

Según los datos del estudio aportados por la Consejería de Empleo con motivo de la jornada, que ha inaugurado su titular y vicepresidenta de la Junta, Rosa Valdeón, estos centros han incrementado la contratación de personas con discapacidad, con un 31 por ciento que ha conseguido crear nuevos puestos de trabajo y un 33 por ciento que ha aumentado el número de indefinidos.

El estudio ha analizado la posición financiera, competitiva e impacto social, y destaca la liquidez y reducido nivel de endeudamiento de los mismos.

Entre las recomendaciones, el estudio incide en avanzar en su profesionalización, con el establecimiento de un sistema de acreditaciones que contemple el buen gobierno, el desarrollo personal y la calidad.

Además, propone un impulso de nuevas alianzas para la generación de sinergias que les permitan dedicar más recursos e identificar oportunidades, avanzar en I+D y la identificación de financiación.