Valladolid, Agencias

Alumnos de quinto de primaria del colegio San José de Zamora formaron parte ayer de los cien pequeños "diputados por un día" que ocuparon los escaños de las Cortes de Castilla y León para recetar a sus mayores que apliquen los valores de la audacia y la prudencia para afrontar los problemas que les rodean y ante los que los adultos parecen estar "ciegos".

De la mano del Parlamento autonómico y la organización Aldeas Infantiles SOS, que cumplen 10 años de colaboración para realizar esta actividad formativa, los escolares de ocho colegios de la comunidad han trabajado desde principio de curso los conceptos de la audacia y la prudencia en la toma de decisiones. Antes del inicio de la sesión, la presidenta de las Cortes, Silvia Clemente, les ha felicitado por la experiencia y les ha animado a que, dentro de unos años, puedan aspirar a convertirse en representantes democráticos de sus vecinos, aunque primero les ha conminado a "formarse y aprender a convivir en un clima de respeto, tolerancia, participación y libertad".

Desde la tribuna de oradores del hemiciclo, los portavoces de cada uno de los centros han desgranado historias, anécdotas y reflexiones.

Uno de los más reivindicativos ha sido Ignacio Ramos, de quinto de Primaria en el Colegio San José de Zamora, quien se ha ofrecido a "los mayores" a enseñarles el camino para conseguir "que los sueños sean posibles" y que la felicidad llegue a los ciudadanos. "Nos sobra audacia para encontrar la felicidad en las pequeñas cosas", ha espetado el escolar zamorano con soltura después de preguntarse y preguntar a sus mayores cuándo van a dejar de ver "robos, abusos y extorsiones" en los medios de comunicación. Otros, como el salmantino Pablo Roiz, del colegio Villar y Macías, han homenajeado a Miguel de Cervantes en el cuatro centenario de su muerte al citar que "la valentía que no se funda sobre la base de la prudencia se llama temeridad", porque, ya con sus propias palabras, "la audacia es algo más que ser un gallito y creerse mejor que los demás". También llamó la atención la enseñanza de Sara Ayuso, del Colegio Rural Los Llanos del municipio segoviano de Valverde del Majano, quien puso como ejemplo la renovación que afrontan los águilas en el ecuador de sus vidas y que demuestra que "las decisiones a veces son difíciles y hay que intentar perjudicar lo menos posible a los demás".