El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama) y la Junta de Castilla y León informaron de la detección de un caso de encefalopatía espongiforme bovina (EEB), más conocidos como ´vaca loca´, en una explotación de 127 animales de la localidad salmantina de Narros de Matalayegua, según publica en su edición de hoy La Gaceta de Salamanca. El caso está considerado "atípico", con lo que "no está considerado de riesgo para la salud pública ni implica cambio del estatus sanitario de la cabaña ganadera regional ni de los países".

Según informaron a Ical fuentes de la Consejería de Agricultura y Ganadería, las ´vacas locas´ "atípicas no tienen relación con la alimentación animal ni con déficit del control y vigilancia de la enfermedad", sino que son "casos esporádicos inherentes al animal concreto". Es decir, "no se deben a contaminación de la cadena alimentaria". Por ello, aunque se tomen medidas de prevención en las explotaciones afectadas, tanto la Organización Mundial de Sanidad Animal como la Unión Europea no contabilizan estos focos en el estatus sanitario de los países.

La Junta de Castilla y León, que en 2015 analizó 10.338 animales y todos ellos con resultado negativo, declaró el último foco en 2011. El caso detectado ahora en Salamanca pertenece a una explotación con un censo de 127 animales. La vaca afectada era un animal de 15 años de edad de raza morucha.

El bovino murió en la explotación ganadera y fue enviada a la planta de destrucción de cadáveres para su destrucción (Castellana de Subproductos ubicada en Mozárbez-Salamanca-), centro en el que fue muestreada el 12 de febrero de 2016. Estos análisis son realizados por personal de la Consejería distribuido en todas las plantas de destrucción de cadáveres castellanas y leonesas para tomar las muestras de todos los animales bovinos muertos que superan los 48 meses de edad, "garantizando de este modo la vigilancia completa de enfermedades en todas las fases de la producción animal".

La muestra fue analizada en el Laboratorio Regional de Sanidad Animal de León y posteriormente enviada al Laboratorio Central de Veterinaria de Algete (dependiente del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente) que es el centro nacional de referencia en España. El resultado se confirmó el 3 de marzo, el cual puso de manifiesto que no era un caso de ´vaca loca´ "clásico", sino un "EEB atípico, cepa tipo-H".

El Ministerio notificó oficialmente el foco el 8 de marzo en la RASVE (Red de Alerta de Sanidad Veterinaria). Desde el momento de obtención del resultado del Laboratorio de León, la explotación se inmovilizó para realizar la vigilancia epidemiológica de la enfermedad y se llevaron a cabo las medidas de control necesarias, según informa la Junta. No obstante, las administraciones han anunciado que continuarán con la investigación para conocer el origen del caso. En lo que va de año sólo se había detectado un caso en la UE, en concreto en la región francesa de Ardennes, confirmado el 23 de marzo.

La situación tanto de España como de Castilla y León ha llevado al reconocimiento internacional de "riesgo insignificante", lo que implica que tanto para la sanidad animal como para la salud pública es "prácticamente nulo".