El consejero de Educación de la Junta, Fernando Rey, anunció ayer que su departamento trabaja en la elaboración de una estrategia para evitar centros educativos donde se acumule un porcentaje "desproporcionado" de alumnos de diferentes etnias o nacionalidades. Se trata, según explicó Rey, de evitar "colegios-gueto".

Así lo señaló el consejero de Educación durante su visita al colegio público "Miguel Hernández" de Valladolid, donde más del 30 por ciento de los alumnos son de etnia gitana, aunque también hay estudiantes de diversas nacionalidades como marroquís o de Europa del Este. "Vamos a intervenir sobre centros gueto porque un sistema educativo de calidad no puede conformarse con esta situación", afirmó.

No se puede permitir, según señaló Rey, que haya centros donde el 100 por 100 de su alumnado sea de una misma etnia, como el de La Puebla de Ponferrada (León). En este sentido, el consejero sostuvo, después de precisar que las medidas se encuentran en estudio, se puede llegar hasta cerrar un colegio si se considera que se acumula demasiado porcentaje.

La explicación, indicó, es que para que una educación sea inclusiva y diversa ha de ser con distintas etnias y nacionalidades. Esta situación, continuó, "no es la ideal" porque para que la educación sea de calidad debe de ser diversa que, dijo, es "una riqueza".

En todo caso, insistió, se estudiará "caso a caso" con los profesores y los padres para que el colegio en cuestión pueda garantizar la equidad. Por eso, a lo largo de este año se trazará esta estrategia, cuyas medidas entrarán en vigor el próximo curso pero, reiteró, "no valen soluciones globales, hay que hablar con cada colegio" pero, remarcó, no se va a permitir que haya centros con un 100 por 100 de alumnado de una misma etnia.

Además, aseguró que el hecho de que haya un alto porcentaje de este tipo de alumnos no quiere decir que sea malo, pero no es lo ideal. Por ejemplo, sostuvo el centro Miguel Hernández que visitó es un colegio donde existe una "enorme diversidad" donde el 30 por ciento de sus estudiantes son gitanos y donde se trabaja muy bien con la diversidad con padres y profesores "muy implicados". Este colegio, sostuvo, representa un esfuerzo de calidad, de atención a la diversidad y de equidad. Por su parte, la directora del colegio, María José Gómez, aseguró que es un centro "ejemplo y modelo" de una educación inclusiva, de equidad y calidad, donde se trabaja sin dificultades con los alumnos.