El presidente de la Asociación Internacional de Tauromaquia, el venezolano Williams Cárdenas, defendió ayer la celebración del Toro de la Vega en Tordesillas como "patrimonio cultural del pueblo español y del pueblo de Tordesillas". Según este diplomático y abogado, que siguió el festejo para poder analizarlo en el VI Congreso Internacional del Toro de la Vega y la Tauromaquia Popular como experto, "el torneo no tiene nada que ver con lo que se dice que es, porque conserva el arraigo de la tauromaquia más antigua, una mezcla de campo y ciudad". "Es un enfrentamiento entre el hombre y el toro, totalmente reglado, ya que si se incumplen las normas no se declara ningún triunfador, como ha sucedido este año, y eso lo hace equilibrado", explicó, quien destacó la "gran intensidad" con la que el pueblo de Tordesillas vive esta fiesta.

En opinión de Cárdenas "esta tradición debe mantenerse, porque forma parte de la cultura de un pueblo y nadie tiene derecho a arrebatárselo, porque sería ir en contra de su libertad y supone una agresión hacia una comunidad", en relación a los antitaurinos, a los que ha pedido "respeto". "Su comportamiento me ha parecido excesivo, porque lo que hacen supone un atropello a la libertad de la gente de Tordesillas", añadió Cárdenas.